Con rostros que reflejan el esfuerzo y felices de culminar satisfactoriamente una prueba para beneficio propio, los casi 90 trabajadores que participan del proyecto “Promoción de la actividad física para funcionarios del ICODER”, se acercan en pequeños grupos a la pista del Estadio Nacional para la segunda parte de la etapa de evaluaciones del proyecto.
En esta oportunidad, desde el 29 de enero y hasta el 8 de febrero, es el turno para la evaluación física, donde mediante el Test de Rockport, se mide la capacidad cardiovascular. Semanas atrás los trabajadores superaron la evaluación corporal que contempló variables físicas tales como edad, talla, porcentaje de grasa corporal, porcentaje de masa muscular, agua corporal total, relación cintura-cadera, nivel de grasa visceral, índice de masa corporal (IMC) y metabolismo basal.
En el ICODER son conscientes de la importancia de promover la actividad física y estilos de vida saludable en la población en general, así como al interno de la Institución, por lo que desde la Dirección Nacional se invitó a los trabajadores a ser parte del Proyecto, dado que una buena salud sin duda redunda en la productividad laboral.
A partir del 9 de febrero, en la segunda y tercera etapas, se procesarán todos los datos recolectados de las evaluaciones, se harán las recomendaciones generales, para finalmente confeccionar e implementar un plan de entrenamiento personalizado para cada funcionario con actividades que ayuden a mejorar la salud física de los funcionarios, señaló Josafat Barboza, Coordinador del Proyecto.
Está demostrado que la actividad física practicada con regularidad reduce el riesgo de cardiopatías coronarias y accidentes cerebrovasculares, diabetes tipo II, hipertensión, cáncer de colon, cáncer de mama y depresión. Además, la actividad física es un factor determinante en el consumo de energía, por lo que es fundamental para conseguir el equilibrio energético y el control del peso.
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